¿Por qué escribimos cuando escribimos?

¿Por qué escribimos cuando escribimos? Porque nos gusta claro. Porque no podemos no escribir. Porque nuestros abuelos nos enseñaron que contar historias es la manera más eficiente de preservar la memoria, ¿cómo no agarrarle gozo a la interpretación de la realidad en cualquiera de sus expresiones: tallada, gráfica, simbólica, verbal, representada? Escribimos y aprendemos. Escribimos y nos sembramos de vuelta en el mundo. Incluso si escribimos ficción o, sobre todo, cuando escribimos ficción. Escribir ficción estimula nuestro sistema nervioso de manera eficiente, nos saca del colapso. Nos trae de regreso la memoria de que la acción y la decisión a pesar de la duda son posibles. Nos coloca de nuevo en el movimiento natural de participar activamente en el mundo. Y sobre todo de dejarnos observar por el mundo. Vamos creando nuestra escritura mientras ella nos va creando de vuelta. Escribir es una conversación con la divinidad y nuestras manos. Escribir es dejarse arrullar por la divinidad en el vaivén de nuestros pensamientos. Escribir es rendirse ante la melodía de dios. Escribir es un acto muy simple y hermoso que teje el corazón de nuestra imaginación. Escribir es el pálpito de un mundo a punto de nacer. Escribir es gestar el universo. Escribir es una indagación meticulosa de nuestro espíritu. Escribir nos vuelve locos y salvajes. Escribir nos libera de nosotras mismas. Escribir es amar tanto la vida que decidimos recrearla. Escribir es una oda al fuego que late en nuestros corazones. Escribir es siempre, incluso cuando el escritor esté deprimido, decepcionado, frustrado, enojado, herido, un acto de fe: la historia continúa y en este momento vale más poner una palabra detrás de otra más que cualquier otra cosa. Escribir es involucrarme con como elijo participar en este universo. Escribir es cultivar mi observación, mi atención, mi paciencia y mi devoción a todo aquello que me hace sentir que estoy viva. Escribir me da un lugar en el mundo en el que puedo ensayar el tipo de mundo que soy capaz de habitar.

Por esta y muchas otras razones te invito laboratorio de ESCRITURA VIVA.

No necesitas experiencia. Solo un corazón, una mano y un lápiz.

Si quieres conocer las próximas fechas escríbeme a rabadieh@gmail.com